Esperando un diagnóstico

Estos días se me están haciendo larguísimos...Por un lado tengo muchas ganas de saber el diagnóstico para salir de la incertidumbre. Por otro, soy consciente de que este salir de la incertidumbre puede representar el tener que guardar en un cajón la esperanza de que estén equivocados, que en estos días aún me acompaña, y sacar la fuerza para empezar otra etapa.
Tengo miedo, mucho, mucho, mucho miedo. No debería lo sé, porque estoy en manos de Dios, pero es tan difícil a veces descansar en Él...Solo consigo agarrarme a la fe y pedirLe que me dé la oportunidad de poder seguir con lo que hacía...Que relativo se te hace todo cuando ya no lo tienes tan seguro, cualquier problema se hace insignificante, cualquier detalle se magnifica, el famoso "ordinario" del que tanto nos quejamos a veces se hace tan, tan, tan extraordinario que darías cualquier cosa para volver a tenerlo.

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